Panificadora Pepín, fundada en 1962 por José “Pepín” Sorrentino y su hermano Rafael, es sinónimo de calidad, tradición y familia en Puerto Rico. Reconocida por sus famosas Mallorcas, esta empresa ha sido un pilar en la mesa puertorriqueña por más de 50 años, gracias al arduo trabajo de sus panaderos y su compromiso con la excelencia.